El silencio de Marzo de 2024 era absoluto. No era paz, era ausencia. Un vacío helado donde la muerte me miró a los ojos, prometiendo borrar no solo mi voz, sino mi esencia. Y fue en ese silencio final donde irrumpió la vida, con el eco de unos pasos que habían recorrido 400 kilómetros. Mi madre, Cintia, no solo me devolvió mi renacer; también me devolvió la posibilidad de conservar mi esencia... mi voz.

Desde entonces, me pregunto cómo usar esa voz recuperada para agradecer lo inexpresable. Y la respuesta, como siempre, estaba en sus manos. La he observado toda mi vida tejer vida donde solo hay retales. Es una artesana, una creadora cuyo legado se cose puntada a puntada. Sus muñecas, preciosos broches hechos a mano, son compañeras mudas. No hablan, pero lo dicen todo. Son un universo de ternura silenciosa, un hilo de amor que protege y acompaña.

Fue entonces cuando lo entendí. No podía responder a su milagro con una palabra, sino con un acto de creación; un diálogo entre dos artesanos. Si ella teje vida en el silencio, yo debía tejer mi gratitud en una melodía. Decidí usar mis pasiones, la escritura y la música, y dediqué estos últimos meses para darle voz a una de sus obras, para que una de sus creaciones pudiera cantar. Elegí una de sus flamencas, de su colección "Muñeca de Andalucía", y le compuse un alma en forma de canción. Un tema interpretado por una artista maravillosa, donde la propia muñeca no solo canta un recorrido de feria en feria por ciudades andaluzas, sino mi profundo agradecimiento.

El próximo 26 de junio, este blog inaugurará una nueva sección llamada "Muñeca de Andalucía", y con ella, el lanzamiento de la canción a las 22:00 de la noche en SoundCloud y sus respectivo videoclip el 27 de Junio a las 18:00. Es mi forma de que el mundo escuche, no solo mi gratitud, sino el eco del amor silencioso que mi madre pone en todo lo que crea. Es la canción que nació del silencio, para celebrar la voz que me devolvió la vida y para honrar el legado de las manos que me salvaron.